Muchos líderes religiosos comenten errores de conducta pública que tristemente repercuten en todas las iglesias, como que el error fuera de la iglesia cristiana, y no de hombres ambiciosos de poder, que se aprovechan de la plataforma religiosa, para inmiscuirse en los negocios de este siglo, desobedeciendo las enseñanzas bíblicas.
En el documento sobre la verdad respecto al golpe de estado al depuesto presidente Manuel Zelaya, se afirmó en algunas partes el contubernio de algunos pastores con el presidente depuesto, así como su apoyo a los acontecimientos del 28 de junio del 2009, respaldando públicamente el gobierno provisional presidido por Roberto Micheletti. Esta intervención de líderes religiosos dividió la iglesia, descalificándola para ser mediadora, porque se alineo políticamente de un lado y de otro, olvidando el principio de que como ministros del evangelio y que “nuestro reino esta en los cielo” siendo Jesús nuestro único Señor. Siempre que los hombres religiosos se inmiscuyen en asuntos políticos, quien sale perdiendo es la iglesia, que en cierta manera, no puede ser representada por un ministro, llámese reverendo, obispo, o apóstol, porque nadie puede asumir la voy de los millones de creyentes que no pensamos igual que ellos, porque cuando se salen de la Palabra de Dios, no hablan como representante de la iglesia, sino como ciudadano a nivel personal. Recordemos que en la iglesia hay diversidad de ideas políticas, y todas son valederas a lo personal, siempre y cuando no se sobrepongan a la verdad bíblica.
En Nicaragua la iglesia se enfrenta a una situación parecida a la ocurrida en Honduras. Pastores evangélicos se han aliado al presidente Daniel Ortega para apoyar su reelección, violentando, según algunos expertos, la constitución. Estos ministros se atreven a hacer declaraciones avalando a un gobierno y catalogándolo de cristiano (porque para ser cristianos hay que nacer de nuevo) por el hecho de ayudar a los pobres. Varios líderes religiosos, entre ellos el pastor Neftalí Cortés alabó públicamente al gobierno sandinista, tratando de influenciar en las próximas elecciones y afirmó: “Lo que vemos en ellos (comandante Daniel y compañera Rosario) son signos claros y evidentes del evangelio de nuestro señor Jesucristo (…) Yo afirmó lo contrario de lo que se dice (los pocas voces que critican al gobierno Sandinista), que este gobierno está haciendo una noble labor cristiana y su carácter cristiano es evidente»[1]. Tristemente tal posición es comprometedora, pues no todos piensan iguales, y el alineamiento religioso produce división en la iglesia del Señor.
La política es un asunto terrenal, transitorio y cambiante. En ella no debe intervenir la fe, ni debemos usar la religión para apoyar o descalificar a un gobierno, porque nosotros proclamamos otro reino superior. Me indigna ver como ministros, dejando de un lado el mensaje de Cristo, se comprometen con políticos, que a veces son corruptos. Es una afrenta al evangelio el juego entre política y religión, porque hay que darle al “Cesar lo que es del Cesar ya Dios lo que es de Dios”. Es una vergüenza que por ejemplo, Esteban Handal, que se presenta como líder religioso, y monto un canal cristiano, use ese mismo canal para hacer política, y mescle la luz con las tinieblas. Vemos como paso de político a ministros y ahora regresa de ministro otra vez a político.
Honduras está sufriendo un caos electoral. La división partidista, la corrupción y la ambición están creando una avalancha de partidos que van a dividir mas al país, y las próximas elecciones serán tan fraccionadas, que difícilmente gane un candidato por mayoría simple (mitad mas uno). Las Iglesia tendrán hermanos de todas estas corrientes, y debemos respetarles en su conciencia natural, no tomando como ministros, partido por uno u otro, aunque en lo íntimo tengamos nuestras opiniones. No dejemos que expresiones de hombres religiosos alineen a la iglesia, o confundan a los cristianos en una mayor división. Actuemos prudentemente y sabiamente, como representantes del reino de Dios en la tierra.



Sr. Fumero:
Nosotros los ministros del Evangelio hemos sido llamados a predicar el evangelio de Jesucristo, no ha prosélitar gente adeptos para un partido por bueno que se vea o su candidato. Jesús dijo: (Marcos 16: 15. ) “id por todo el mundo, predicad el evangelio a toda criatura”. Nunca dijo que predicáramos la política.
Cuando leemos el testimonio de Jesús en las Escrituras, él está tratando de hacer que la gente regrese al principio, al gobierno teocrático, por supuesto ese es el gobierno de Dios. (1 de Samuel 8: 1- 3, 4, 5, 6,7). Cuando Samuel envejeció, puso a sus hijos por jueces sobre Israel. Estos no anduvieron en los caminos del Señor. Los ancianos del pueblo se reunieron, fueron a ver a Samuel en Rama, y le dijeron: “Tú has envejecido, y tus hijos no van por tus caminos. Por tanto constitúyenos un rey que nos gobierne”. Y Samuel oró al Señor. Pero el Señor dijo a Samuel: “Oye la voz del pueblo en todo lo que dicen, porque no te han desechado a ti, sino a mí, para que no reine sobre ellos.
Mi punto de vista es que estos pastores inmiscuidos en asuntos políticos, están confirmando las decisiones equivocadas de los hombres que buscaron la voluntad permisiva, en vez de la voluntad perfecta. La voluntad perfecta era la primera, Dios gobernando desde el cielo y la permisiva era que el hombre gobierna por la democracia, haciendo la voluntad del pueblo y no la de Dios.
Estos falsos predicadores se meten en estos negocios porque los lleva la sed de la fama, el dinero y no el amor a las almas perdidas.
Que Dios lo bendiga por sus escritos a los cuales nada tenemos que ponerle.
La verdad es que no se le puede llamar líderes religiosos, a quienes actúan como cualesquier pistero que busca poder y bienestar en nombre de Dios, actúan igual que sus maestros mintiendo y manipulando a sus seguidores.
Como paso en los Estados Unidos que para que el presidente Obama fuera elegido lo vendieron en la campaña como cristiano sabiendo que es musulman, pastores se encargaron de llevar a las congregaciones el engaño y asi ganar votos para el. Y ahora se paga el precio del desastre que el pais esta viviendo.
LA POLITICA Y LAS SAGRADAS ESCRITURAS SON COMO EL AGUA Y EL ACEITE NUNCA SE MESCLAN , PUEDEN ESTAR EN EL MISMO FRASCO PERO JAMAS SE UNIRAN,ALGUNOS LOBOS VESTIDOS DE OVEJAS SON LOS QUE QUIEREN HACER ESA MESCLA IMPOSIBLE,HAY QUE HUIR DE ELLOS EN VELOZ CARRERA.
El único Líder para los que verdaderamente le aman se llama Jesús (Yeshua) y la única política a seguir está escrita en un libro denominado para nosotros «BIBLIA» (Sagradas Escrituras) fuera de esto, es doctrina de hombres, por tanto llena de errores, blasfemias y herejías tan abrumadoras que llevan al prosélito a un barranco, a un abismo, a una perdición total y permanente.
Recuerdo muy bien ese domingo 28. Cuando por una radio de cobertura nacional salió al aire un pastor de Tegucigalpa. Trayendo un mensaje para calmar a las masas. También pidió que oracemos a Dios para que aquéllo que habían tomando la delantera (militares y burgueses)nos guiaran por el buen camino. De ahí en adelante este pastor me dejo mal sabor de boca. Pienso que él sabia de lo que se venía. Así como él, otros líderes religiosos sabía de los que se nos vendría.
Dios tenga misericordia de todos nosotros. Igual, también los pastores deben aprender a no tocar temas políticos durante las predicas de los mensajes. Y cuando lo quiera hacer, bueno que se baje del púlpito y que nos comente acerca de sus ideales y posturas políticas.
Vuelvo a decir. Dios ten misericordia de nosotros.
No me sorprende tanto que existen líderes religiosos que se metan en estos asuntos, me sorprende más como pueden convencer a cientos o miles de hermanos, no bueno, es que la falta de conocimiento bíblico tiene graves consecuencias.
Conocí al hermano Yiye Avila.
Conocí el ministerio del hermano José Ávila allá por los años l964. Yo era un joven predicador. Fue por medio de un amigo guatemalteco, asistí a una convención internacional en Guatemala. El hermano Manuel Makall Marroquin que era el Superintendente de las Misiones Mundiales Internacional para Centro América. Me contó de cómo el Señor usaba a este gran Evangelista con el ministerio de salvación y sanidad divina, el hermano Makall me dio la dirección y me dijo que le escribiera, lo hice he inmediatamente me contestó y me propuso que representara en el Salvador el ministerio radial. Fue de gran bendición, estuve unido a este gran ministerio por diez años. Tuve la oportunidad de celebrar campañas con el Rev. Edinaldo Robles, el policía convertido a Cristo, esas campañas fueron para mí ministerio una gran escuela. El hermano Yiye siempre nos recomendó ayunar, orar, santificarse, ser sinceros, honestos. El ministerio del hermano Ávila entre los pentecostales es único, no habido evangelista tan poderoso entre las denominaciones como el ministerio del hermano Ávila.
Me sorprende al leer lo que hablan algunos críticos, no entiendo cual es el odio en contra del hermano Yiye, muchos dicen que las lenguas que el habla siendo ungido por el Espíritu santo son falsas, eso no es verdad, yo estuve cerca de el y escuché en muchas ocasiones sin que hubieran aparatos eléctricos que facilitaran algún truco como suelen decir, era la manifestación real del Señor. Vi milagros bien reales, sanidades que nunca había visto antes. Yiye Ávila es un hombre real de la Edad Pentecostal hay miles en todo el mundo que pueden testificar de este gran hombre de Dios. Yo soy testigo, fue allí donde Dios me inspiro para comenzar hacer campañas evangelisticas y pude ver el poder de Dios, allí me di cuenta que Jesucristo escucha al que con sinceridad le pide al Señor.
El hermano Yiye ha sido un hombre fiel a lo que él cree, ha mostrado ser un verdadero soldado de fe. Cuando su hijita Lily fue asesinada el ángel del Señor le dijo que perdonara al hombre que le dio muerte, fue y lo abrazó y lo convirtió a Cristo. ¿Quién de Uds. que han hablado mal lo haría? ¿Es eso hipocresía? Solo un hombre de Dios lo puede hacer por medio del Espíritu Santo. Luego Dios se llevó a su otra hija, Noemí y Ud. pudo verlo llorando dando gracias al Señor aceptando su voluntad.
Yo les pido que vayan y pidan perdón a este gran hombre de Dios, quizás el Señor los perdone. Esto es un poquito de lo que puedo decir; pero puedo escribir un libro completo de lo que yo vi de él y de muchos de los colaboradores del hermano Yiye.
Rev. Pr. Mónico Pereira Cubías.