Mario E. Fumero
¿Te has sentido alguna vez, solo, desanimado, preocupado, y sin recursos para emprender una visión, o un trabajo para el reino del Señor? Pues quiero que sepan que a mí sí me ha pasado y así me sentía el otro día.
Yo se que por la edad que tengo, y lo enfermo que me siento, más el deseo que tengo de hacer más de lo que puedo rápidamente, no reconociendo los límite de mis fuerzas, muchas veces provoco estas crisis que me afectan. También me olvido que los hombres fallan, pues al mismo Jesús le fallaron los 11 de los 12 discípulos cuando agonizaba en una cruz del calvario, acompañándolo solo Juan el discípulo amado. No puedo esperar de mis líderes, ni de mi iglesia un mayor apoyo moral, y sé que algunos no se identifican con mi visión, ni se hace presente para infundir aliento y apoyo moral en momentos críticos, porque están ocupados, y además, soy un viejo cansado y con una gran preocupación que vive de un pasado que ya no existe.
Reconozco que muchas veces tomó decisiones que van más allá de mis fuerzas y de mi recursos, sin embargo, en medio del desánimo y la soledad, siento la voz de Dios que impulsa y me dice, «no te preocupes, yo estoy contigo». Eso me ocurrió anoche. Al amanecer aparecieron varios problemas, y sentí que «el agua me llegó al cuello». Se acabo el cemento, se rompió una pieza de la máquina para hacer el concreto, varios internos que trabajaban se fueron, en fin, todo salió al revés, y sobre todo, sentí la indiferencia de los líderes en la iglesia.
De pronto recibí nuevas fuerzas, y cuando sentía que no podía mas, y ya no tenía recursos para seguir adelante, y me ahogaba en los problemas, ore al Jesús y le dije: «Señor, este es tu problema, yo soy tu siervo» y de forma inesperada, envío un ángeles de carne y hueso, para decirme «sigue adelante». Llego a visitarme un amigo y me dijo: «Dios me saco del trabajo y me trajo aquí, y ha puesto en mi corazón darte es la ofrenda para la construcción de la calle» Aleluya.
Ese mismo día mande a comprar el repuesto para la máquina mezcladora que se había roto, y compre algo de cemento, pues el cemento que me iba a donar el FHIS no llegó y lo espero desde hace meses, y estaba a punto de parar todos los trabajos. Pero mi Dios todo lo sabe. ¿Para qué contarle a los líderes mis problemas, si a ellos no les interesa? ¡Ha! Pero mi Señor sí conoce no sólo mis problemas, sino también mi corazón y necesidades».
Unos días atrás, una hermana me envió un correo electrónico, para animarme, y me comento que Dios había puesto en su corazón buscarme una ayuda económica de un pariente suyo en Inglaterra para el trabajo del Proyecto. Ese mismo día, el de la tribulación, dicha hermana me llamó diciéndome que su pariente en Inglaterra quería dar una ayuda a un proyecto social, y ella sintió en su corazón proponerle que fuesen para el Proyecto Victoria, y de pronto, parte de los problemas para seguir adelante quedaron atrás.
Cada día veo la mano de Dios obrando maravillosamente. No necesito explotar la fe, ni vender bendiciones, ni llorar miseria. Tan solo tengo que confían en aquel Dios todopoderoso que siempre obra de forma inesperada. Es por ello que cada día cantó ese hermoso himno, el cual declara que «tu fidelidad es grande».
Cuando te sientas solo, y te falten las fuerzas, y sientas que no puedes más, detente y medita en la providencia divina, y cuéntale a tu Señor tus problemas. Él nunca te fallara, aunque tus amigos y tu iglesia te fallen. No mires la indiferencia de algunos hermanos, porque ellos no tienen la culpa de la carga que Dios te dio a tí, y posiblemente no comparten tu visión, porque el que tiene la visión, es el responsable de ejecutar la misión. Además, es responsabilidad del que te llamó aparejarte todo lo que necesites para la ejecución de la visión.
Todos tus problemas en la obra del reino dáselo al que te llamó, porque «Cristo es el Señor», y tú eres su siervo. El amo es responsable de darle al siervo las herramientas para ejecutar su trabajo, y es ahí cuando él envía ángeles de carne, y aun inconversos, para que hagas lo que él te mando a hacer.
Gracia Señor por tu don inefable.


reenvio y comparto este escrito a otros, con su permiso.
Solo un Torpe no ve la verdad que tiene ante sus ojos, pero un Falso es aque que la ve pero no la retiene.
Ni Torpe ni Falso es el verdadero Cristiano.
animo hermano Fumero, aquí en Guatemala fuimos bendecidos con su visita el año pasado, todos sabemos, para la gloria de Dios, que fué utilizado para llevarnos el mensaje poderoso de la Palabra de Dios, Nuestra ciudad fue impactada por el mensaje, unidos contra la apostasía, así que aquellos que no le apoyan, no saben la bendición que se están perdiendo, y de sus escritos ni hablar, que son como un atalaya al verdadero pueblo de Dios, que son un un testimonio a todos aquellos que no quieren obedecer la verdad del evangelio. Saludos desde Guatemala. y Dios mediante le esperamos nuevamente éste año en el país de la eterna primavera .
Ánimo Mario, porque un misionero que llegaba del Àfrica, al ver que nadie lo vino a buscar, sintió el peso de la soledad, pero su mujer le dijo: CALMA … todavía no llegamos al reino de justicia.
Un abrazo grande !!!
¡Gloria a Dios quien sostiene y fortalece a sus hijos con tan gran maravilloso y tremendo llamado como el suyo! ¡Nuestro Dios sea la fortaleza cada día para su vida y el proveedor para llevar a cabo la visión que el ha dado! Usted es de bendición para miles de cristianos. !Doy gracias a Dios por su vida, quien proveerá conforme a sus riquezas en gloria! ¡Dios siga bendiciéndoles grandemente!
Dios le bendiga mi amado es hermano es una bendicion leer sus articulos creo que el que lo a llamado es fiel…
Pastor Mario DIOS me lo bendiga grandemente.
eso es lo bello de vivir el evangelio, que DIOS envía la ayuda de donde menos lo esperamos, lo comprendo es normal que a veces nos sintamos atribulados porque somos humanos pero recordemos que nuestro señor JESUS también fue hecho carne y fue probado en todas las áreas y lo único que hizo fue confiar en el padre, doy gracias a DIOS por su vida porque usted también está confiando en el único que siempre es fiel, y le dará la fuerza, sabiduría, el discernimiento y la ayuda que usted necesite y estoy más que seguro que usted será uno de esos pocos escogidos que tiene el señor, DIOS me lo bendiga.