Mario E. Fumero
En el año 1970 realice la gira más bendecida de mi vida. Estuve en Perú, conociendo a una gran misionera que era la mujer más amorosa y entregada al Señor, fue la Hermana Omega Vega. Después fui invitado a Chile de forma engañosa, para intervenir en un mitin político, a lo cual me negué, dejándome en un hotel de Concepción, sin los gastos del viaje. Fue allí en Concepción, Chile que los pastores quisieron que me quedará para predicar, y conocí a la que hoy es mi esposa, de origen Noruego y misionera, Lisbeth Jensen Fumero. Nos hicimos novios y un mes después salí para Buenos Aires, Argentina, con el pastor Juan Carlos Ortiz que me hospedo en su casa y compartí su visión de unidad en amor y discipulado en la Iglesia Tabernáculo de la Fe en la calle Hidalgo. Había un hermoso mover del Espíritu en la unidad de la iglesia a través de la restauración el Discipulado fueron mi quehacer y formó parte de todo mi quehacer misionero, tanto en Honduras como en España.
Después de 44 años sin visitar Argentina, fue invitado por las «Iglesias Ríos de Vida» de ese país, y aunque uno de los promotores de este evento el querido Hermano Ernesto, fue ingresado grave y operado, siempre seguimos adelante con los eventos gracias al apoyo de Alejandro Engler y su esposa, que fueron una bendición para mi estancia en ese lugar.
El objetivo del viaje era preparar a la iglesia para enfrentar los tiempos difíciles, principalmente en el área de la apostasía. En el pasado Argentina había experimentado movimientos de unidad y restauración eclesiástica, pero tristemente, al no tomarse ciertas precauciones, ese mover de Dios no se cristalizo en un gran avivamiento y unidad en principios.
Tuvimos ocho días de gran actividad a tal grado que al tercer día me quedé sin voz, pero gracias a Dios seguimos adelante. El Hermano Alejandro recorrió aproximadamente 3,000 kilómetros, comenzamos en la ciudad de San Pedro y después tuvimos en la ciudad de Gobernador Castro, donde me quede con Alejandro, el día 15 de agosto una reunión con pastores y líderes que vinieron de diferentes lugares de Argentina, comenzando a las diez de la mañana, y terminando a las cinco de la tarde. Un tiempo muy hermoso en donde tuvimos un amplio compartimiento.
El 16 y 17 de agosto iniciamos las conferencias en la iglesia de San Nicolás, en donde aborde varios temas, principalmente el del engaño y la señales proféticas sobre la crisis espiritual en los últimos tiempo. Vinieron pastores y líderes de diversos lugares del país, algunos hasta de 500 Km de distancia. Tuvimos un tiempo de refrigerio y convivencia en donde pudimos profundizar en los acontecimientos
proféticos relacionados con el quehacer de la iglesia tanto en lo secular como en la misma iglesia. El domingo en la mañana, sin voz casi, predique y en la tarde nos fuimos a Buenos Aires, pero ya no tenía voz, sin embargo viajar tan lejos y no hacer lo programado era algo ilógico y me puse en las manos del Señor. Salimos a la capital a las 5 p.m. y el promedio de viaje era de 1 hora 30 minutos, pero había tanto trafico que nos echamos 4 horas, así que al llegar se había terminado el culto. ¡Gloria a Dios! el Señor me libero del compromiso porque no tenía ni voz ni fuerza, pero él me ayudo. Creo que ha sido la única vez que me he sentido contento de no poder predicar.
El lunes 18 de agosto viajamos a Santa Fe y estuvimos en la Iglesia que pastorea Carlos Caracci estando los estudiantes del Instituto Bíblico «Casa Bíblica» en donde también visitamos. Fue un ambiente maravilloso, el culto más lindo y de mas quebrantamiento a los cuales haya asistido en los últimos tiempos.
Gracias al Señor descansamos el martes, saliendo en la noche para la capital, pues el miércoles tendría dos reuniones, una en la mañana con los líderes del movimiento Ríos de Vida de la provincia de Buenos Aires, y en la noche el culto en la iglesia que no pude predicar el domingo en la noche, por llegar tarde, y aunque no era un día normal de culto asistieron muchos hermanos.
Salí para Honduras el 21 de agosto, a las 3 a.m. hora Argentina, y llegue a las 3.30 pm hora de Honduras que seria 6.30 horas de Argentina y puedo decir que hasta aquí nos ayudo el Señor.









Soy el pastor alberto rey de Cuba, cualquier hermano que lea este mensaje. Fabor de decirle al pastor Caracci se comunique conmigo, bendiciones…alberto