Mario E. Fumero
Actualmente en la Naciones Unidas está fraguando un plan para imponer en algunos países, de una forma astuta y solapada, la imposición de la ideología de género dentro de los planes educativos, y tratan de llevar esa ideología más allá de la educación, al implantarlo como norma de conducta social de forma jurídica, de manera tal, que cualquiera que rechace, critique o se oponga a dicha idea, será acusado de hacer “apología al odio” y se está planteando introducirlo como una violación a los derechos humanos cualquier ideal que trate de imponer la crítica a los movimientos LGTBQ.
Las fuerzas ocultas. que se esconden detrás de la agenda 2030, no descansan en su afán de introducir, como norma de conducta social, la existencia de un sexo neutro, como se le llamen en Estados Unidos, en donde se define como el sexo X, por lo cual tiene el derecho a escoger, no sólo el sexo que desee, aunque vaya contra la biología, sino cualquier otra aberración, que antes se consideraba trastorno mental, pero que ahora se considera una conducta normal.
¿Qué se esconde detrás de la imposición de la ideología de género? Indudablemente se quiere llegar a la legalización de la pederastia como norma de conducta. Estos grupos pederastas, ya organizados y apoyados por multimillonarios y Hollywood, han fabricado su bandera pedófila, e incluso, están tratando de crear partidos políticos o corrientes que vayan lavándole el cerebro de la población, para ver como norma la relación sexual con menores, lo cual es una conducta aberrante, que actualmente es castigada jurídicamente.
La ideología de género destruye la familia clásica y la multiplicación de la especie. La legalización de todo esto se considera una aberración mental, y para colmo, hace que todo lo que antes era ilegal, ahora se vuelva legal.
Frente a tan poderosa corriente de los movimientos LGTBQ ¿Qué pueden hacer los padres, maestros, educadores, pastores, y sacerdotes? Forma un nudo sólido que pueda frenar a los gobiernos de turno en sus planes de implementar, bajo imposición jurídica y extranjera, esta ideología. El permanecer callado nos hace cómplice, el levantar la voz es un deber, porque está en juego, no solamente el futuro de nuestros hijos, sino también de la sociedad en sí, porque si se destruye la familia, la sociedad sucumbirá, y convertiremos al mundo en una Sodoma y Gomorra, donde el juicio de Dios vendrá, y todos sufrimos las consecuencias de nuestro silencio.
Por nuestros hijos, debemos de unirnos y plantarnos firmes frente a los planes educativos liberales, y revisar los libros de textos que se quieran implementar, así como luchas para que las escuelas privadas no sean controladas por el Estado, para que impongan una educación a la medida de la agenda 2030, principalmente en los puntos 4 y 5 de sus 17 objetivos. Además, está en juegos nuestra libertad de conciencia y de expresión, porque las aspiraciones de estos movimientos es ir contra todos lo que no acepten su ideología, y se atrevan a criticarla, enseñar u opinar lo que biológicamente es correcto.
En estos momentos ya se está fraguando en las Naciones Unidas, y con la venia de algunos gobiernos del tercer mundo, las nuevas técnicas, para introducir solapadamente esta malévola ideología, así que estemos alerta, porque está en juego la salud sexual de nuestros hijos.



Así es respetado Mario, todo este nefasto tema de la legalización del aborto y promoción de leyes para legalizar cirugías de reasignación de sexo en los niños y niñas son parte de esos planes maléficos. Dios nos ayude para resistir, alzar la voz y no permitir semejantes atrocidades
MUCHAS BENDICIONES QUERIDO HERMANO MARIO, HE LEIDO CONSTANTEMENTE LOS TEMAS, SON DE MUCHAS BENDICIONES.
Aqui les dejo un artículo escrito por un sueco valiente, porque en Suecia hay que ser valiente para atreverse a criticar lo que la mayoría da por correcto:
https://gospel.mboards.com/2149777/13115825-el-ladron-detras-del-juez-fobias/