Un hijo tras el fallecimiento del padre decidido, al quedar su madre, en vez de llevarla a su hogar, decidido dejarla en un asilo de anciano. Estando su madre en el ácido el hijo la visitaba de vez en cuando, Quizá lo hacía una vez al mes porque vivía todo el tiempo muy ocupado. Un día, recibió una llamada del asilo, informando que Su madre estaba muy grave y su situación era tal, que preveían que morirían. Fue corriendo al asilo para ver a su madre antes de que ella muriera. Ya, al lado de su lecho de muerte comenzó a conversar con su mamá y le preguntó: Mama que hago por ti, ¿te llevo a un hospital? .
La madre le miró como una mirada de angustia y le replico: ¡No! Hijo mío, solo quiero pedirte un favor, coloca ventiladores en el asilo, porque hace un Calor insoportable, también
quiero que compres una refrigeradora porque la comida se arruina, y muchas noches tuve que ir a cama sin haber comido nada, porque la misma se dañó”.
El hijo quedo asombrado y sorprendido por la situación que su madre vivió en el asilo replico: “pero ¿porque me estás pidiendo estas cosas cuando ya te estas muriendo?, ¿Porque no me lo dijiste antes?
La madre le respondió con una mirada muy triste: “hijito, yo me acostumbré a convivir con el hambre y el calor toda mi vida, pero mi miedo es que tu no puedas acostumbrarte cuando tus hijos no se esfuercen por cuidarte en casa y te envíen aquí, cuando estés viejo. ¡¡No quiero que tú sufras, lo que yo he sufrido!!
RECUERDA SIEMPRE: TODO AQUELLO QUE HAGAS EN LA VIDA…TE SERA DEVUELTO
Porque todo lo que sembramos eso será lo que cosechamos.


