EL ZAPATERO Y EL HOMBRE RICO

Había una vez un zapatero que disfrutaba mucho con su trabajo, pese a que solo le alcanzaba para lo justo. Tenía por vecino a un hombre muy rico, al que le sorprendían los cánticos felices del zapatero, pues vivía en una humilde morada, así que un buen día fue a visitarlo. «¿Cuánto gana al día?», preguntó. «Pues mire, vecino. Por mucho que trabajo solo obtengo unas monedas para vivir con lo justo, por lo que la riqueza no es el motivo de mi felicidad», contestó. «Eso pensé y vengo a contribuir a su felicidad», dijo el hombre, mientras le extendía una bolsa llena de monedas de oro.

El zapatero no se lo podía creer. Tras agradecer el gesto al hombre rico, guardó con celo su fortuna bajo su cama, pero, a partir de entonces, ante el temor de que pudieran robarle, no dormía bien y su trabajo se vio tan resentido por la falta de sueño y energía que dejó de cantar de felicidad. Así que decidió devolver las monedas a su vecino.

«Verá, antes de tener esta fortuna era muy feliz. En cambio, ahora, solo vivo preocupado por proteger mi fortuna y no tengo ni siquiera la tranquilidad para disfrutarla», le dijo al hombre rico, que se quedó muy sorprendido. No obstante, ambos comprendieron el mensaje: que la riqueza material no es garantía de la felicidad.

[el rincón del pensamiento].

Avatar de Desconocido

About unidoscontralaapostasia

Este es un espacio para compartir temas relacionados con la apostasia en la cual la Iglesia del Señor esta cayendo estrepitosamente y queremos que los interesados en unirse a este esfuerzo lo manifiesten y asi poder intercambiar por medio de esa pagina temas relación con las tendencias apostatas existentes en nuestro mundo cristiano.
Esta entrada fue publicada en Articulo, Ilustración. Guarda el enlace permanente.

Deja un comentario

Este sitio utiliza Akismet para reducir el spam. Conoce cómo se procesan los datos de tus comentarios.