Genovevo Feliciano Morejón Vizcaino

Las cosas que Dios se ha propuesto hacer, no las ha realizado en una etapa, sino por segmentos. En eso consiste; lo que llamaré “el paso a paso de Dios”, lo cual explicaré sobre un ejemplo, empleando el capítulo uno de Génesis.

Cuando se lee el capítulo 1 de Génesis desde el versículo 3 al 31, vemos, que en la voluntad de Dios estaba, hacer una tierra con: Luz, días, noches, cielos, tierra, mares, arboles, días, noches, años, sol, luna, aves, bestias, serpientes y hombres. Sin embargo, dice en (Gn.,1:1-2): “En el principio creó Dios los cielos y la tierra. Y la tierra estaba desordenada y vacía, y las tinieblas estaban sobre la faz del abismo, y el Espíritu de Dios se movía sobre la faz de las aguas”. Cuando Dios creo la tierra, lo obtenido; no coincidía con su voluntad, porque la tierra estaba desordenada y vacía.

Este es el estilo de crear de Dios, primero crea el contenedor y luego en sucesivas etapas de trabajo, va añadiendo o modificando elementos, hasta satisfacer su voluntad a plenitud. La consumación de las diferentes etapas es; el paso a paso de Dios. En la voluntad de Dios se encuentra crear un hombre caracterizado en (Gn.,1:26A): “Entonces dijo Dios: Hagamos al hombre a nuestra imagen, conforme a nuestra semejanza”, este individuo se corresponde con un ser espiritual. Mas, lo que hizo Dios fue el contenedor de un ser espiritual; un ser viviente. Según (Gn.,2:7): ‘Entonces Jehová Dios formó al hombre del polvo de la tierra, y sopló en su nariz aliento de vida, y fue el hombre un ser viviente.

El paso a paso de Dios en la creación del hombre, tiene como objetivo llevar al ser viviente creado en (Gn.,2:7) a un ser espiritual (nueva creación), lo cual esta corroborado en (Fil.,1:6): “estando persuadido de esto, que el que comenzó en vosotros la buena obra, la perfeccionará hasta el día de Jesucristo”. Perfeccionar significa: Concluir íntegramente una obra, brindándole el mayor grado posible de excelencia o la capacidad de desempeñar con exquisitez; aquello que le corresponde.

Una mujer al detectarse en cinta no tiene que preocuparse, por el desarrollo del feto, porque Dios tiene un programa, lo mismo posee para la transformación del ser viviente a espiritual, este programa se denomina; la gracia de Dios. Pero, si la mujer en cinta no realiza una rutina de vida adecuada, puede abortar, así mismo; el cristiano.

Las escrituras declaran que: “Todo fue hecho por Él y para Él”. En la actualidad solamente, se cumple la primera parte: “Todo fue hecho por Él”. El paso a paso de Dios hará que se cumpla la segunda; “Todo fue hecho para Él”, para ese entonces; Dios se manifestará como Gobernador (Rey) y dueño absoluto de todo lo creado por Él, que es todo lo que existe; por lo que absolutamente nadie podrá tener propiedad ni ganancias de los recursos naturales.

El pasaje de (Gn.,1:8): “Y los bendijo Dios, y les dijo: Fructificad y multiplicaos; llenad la tierra, y sojuzgadla, y señoread en los peces del mar, en las aves de los cielos, y en todas las bestias que se mueven sobre la tierra”, estable una dependencia entre el hombre y la creación. El hombre depende de lo recibido de la creación y la creación depende del trato del hombre. Por tal motivo cuando Dios haya transformado el ser viviente en ser espiritual, necesita colocar cielos nuevos y tierra nueva. El paso a paso de Dios nos dice que, aunque no lo veamos estamos en constante transformación.

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