¿QUÉ PIDE DIOS DE NOSOTROS?:

*MATEO 22:36-40

36) Maestro, ¿cuál es el gran mandamiento de la ley? 37) Y Jesús le dijo: Amarás al Señor tu Dios con todo tu corazón, y con toda tu alma y con toda tu mente.

38) Este es el primero y grande mandamiento.39) Y el segundo es semejante a este: Amarás a tu prójimo como a ti mismo.40) De estos dos mandamientos dependen toda la ley y los profetas.

*Deuteronomio: 10:12-13: Ahora, pues, Israel, ¿qué pide El Señor tu Dios de ti, sino que temas a Jehová tu Dios, que andes en todos sus caminos, y que lo ames, y sirvas a Jehová tu Dios con todo tu corazón y con toda tu alma; que guardes los mandamientos de Jehová y sus estatutos, que yo te prescribo hoy, para que tengas prosperidad.

Qué consuelo más grande tener a Dios en nuestras vidas, sabemos que podemos ir a Él y pedirles consuelo, paz, dirección, solución a problemas, podemos pedir su provisión, su protección, etc. etc. sin embargo, pocas veces algunos de nosotros nos detenemos a pensar *¿qué pide El Señor de nosotros?

En una relación siempre debe haber dos vías, uno que da, y otro que recibe, y viceversa. Si es hacia un amigo, damos nuestro cariño, atención y cuidado, y esperamos que esa persona tan querida sea parecida a nosotros, o por lo menos que algún día recibamos algún detalle de él. En un matrimonio también el dar y recibir debe ser una acción mutua. Y en nuestra relación con Jesús de Nazareth debe haber esa disposición en nuestro corazón, no solo de pedir y recibir, ¿sino también de interesarnos cada cierto tiempo y recordar qué es lo que pide Dios de mí? La palabra pedir, según el diccionario significa: «Decir [una persona] a otra lo que espera o desea que esta dé o haga, con la intención de que realmente lo dé o lo haga.

«Hay cosas que Dios nos dice, o nos pide y espera, o desea que nosotros en verdad las demos, o las hagamos. Hoy hablaremos de al menos 5 cosas que la Biblia dice que DIOS PIDE DE NOSOTROS, y que se derivan de la síntesis de los mandamientos que Jesús determinó al Interprete de La Ley: Jesús dijo: “Amarás al Señor tu Dios con todo tu corazón, y con toda tu alma, y con toda tu mente. Este es el primero y grande mandamiento. Y el segundo es semejante: Amarás a tu prójimo como a ti mismo.  De estos dos mandamientos depende toda la ley y los profetas “(Mateo 22:37 –40; véase también Gálatas 5:14).

En relación con los dos mandamientos anteriores, podemos destacar al menos 5 cosas que Dios espera de nosotros:

1. Temer a Dios:  Tener temor no es tener terror, temer a Dios es saber que hay un Dios omnipresente, omnipotente y omnisciente que nos ama, que nos cuida, que nos ve a cada instante de nuestra vida y a quién honramos con todo lo que decimos, pensamos y hacemos. Temer a Dios es temer a ofenderle, nos ayuda a entender que todo es por El y para El, nos aparta del mal y lo más importante es el principio de la sabiduría en nuestra vida.

2. Andar en sus caminos: La Biblia nos habla muchas veces de los caminos de Dios, los caminos de Dios son rectos, son angostos, son santos, son justos y más altos que nuestros caminos. Andar en los caminos de Dios no es la opción más fácil, pero si la correcta, andar en sus caminos nos llevará a amarle más cada día, nos apartará de desviarnos y de ir tras nuestros deseos, nos librará de caminar por caminos oscuros y de maldad, andar en sus caminos nos llevará a seguir sus pisadas y a ser cada día un poco más como El.

3. Amarle: Otra cosa que El Señor pide de nosotros es nuestro amor, el amar no es un sentimiento, es someternos a él y decidir amarle por sobre todas las cosas, ¡TODAS!, amar es entregar nuestra vida con libre voluntad a Él, con toda nuestra

 mente, con todo nuestro corazón, con toda nuestra alma, y con todas nuestras fuerzas. Amarle a Él por sobre mí mismo, sobre mi familia, mis posesiones, sobre todo, porque todo me lo ha dado El, y pertenecen a él. Entregar amor debe ser un acto voluntario hacia un Dios infinitamente maravilloso, que, siendo tan grande, y tan poderoso, nos amó primero que nosotros a Él, lo cual se demuestra en que, siendo aún pecadores, entregó a su Hijo amado JESÚS, para que muriera y pagara por nuestros pecados y transgresiones, con su sangre preciosa, la que fue derramada en la cruz del calvario.

4. Servirle: La palabra de Dios dice en *Efesios 2:10 que: «fuimos creados en Cristo Jesús para buenas obras». el propósito de nuestra vida es servirle a Él y servir a quienes nos rodean. Servir al Señor con todo el corazón y con toda el alma como dice la escritura es poner nuestra mente, emociones, sentimientos y voluntad a su entero servicio sin reservas y sin esperar grandes recompensas, el Señor nos pide que le sirvamos, no solo que recibamos bendición tras bendición, no solo que nos equipemos y guardemos para nosotros, sino que demos a los demás y mostremos Su amor a través de nuestro servicio.

5. Guardar sus mandamientos: Mandamiento es una orden emitida por un superior para que sea obedecida, observada y ejecutada, según dice el diccionario. El guardar los mandamientos de Dios es obedecer Su palabra y atesorarla en nuestro corazón, obedecer es hacer Su voluntad y esforzarnos por permanecer en ella. Observar su palabra no es solo leerla sino meditarla, y transmitirla a nuestras futuras generaciones.

¡Que El Señor Jesús guarde tu vida, y prospere toda obra de tus manos, en el transcurso de esta semana que hoy iniciamos!

Avatar de Desconocido

About unidoscontralaapostasia

Este es un espacio para compartir temas relacionados con la apostasia en la cual la Iglesia del Señor esta cayendo estrepitosamente y queremos que los interesados en unirse a este esfuerzo lo manifiesten y asi poder intercambiar por medio de esa pagina temas relación con las tendencias apostatas existentes en nuestro mundo cristiano.
Esta entrada fue publicada en Articulo, Mandamientos, Oración. Guarda el enlace permanente.

Deja un comentario

Este sitio utiliza Akismet para reducir el spam. Conoce cómo se procesan los datos de tus comentarios.