Mario E. Fumero

No podemos ignorar que Hamás es un partido político terrorista dentro del pueblo palestino que gobernaba la Franja de Gaza. Tampoco podemos pasar por alto que ellos ejecutaron un magnicidio cuando, el 7 de octubre de 2023, entraron en territorio israelí y asesinaron —entre niños, mujeres y hombres— a 1,200 personas, tomando además como rehenes a 251 personas, incluyendo niños. Según informes, el ejército de Hamás contaba con unos 30,000 hombres, aunque, de acuerdo con datos de Israel, en los primeros días del ataque judío solo quedaron alrededor de 17,000 combatientes palestinos.

Este hecho desencadenó la ira del Estado judío, iniciándose así la guerra contra los gobernantes de la Franja de Gaza, catalogados internacionalmente como un grupo terrorista. Sin embargo, no cabe duda de que los palestinos, junto con Hamás, han aprovechado esta guerra para ganar la batalla propagandística, presentando al Estado de Israel como genocida y desatando una gran campaña mundial con el respaldo y apoyo financiero de una izquierda que, aunque en el pasado rechazaba parte de estas ideologías, hoy las abraza y defiende.

¿No fueron acaso los sistemas comunistas de Cuba y la URSS los que más persiguieron, encarcelaron y ejecutaron a los homosexuales, tanto en Cuba como en la Unión Soviética? ¿No fue también la izquierda radical la que más se opuso a la imposición del islamismo? Pero hoy, paradójicamente, son los abanderados de la defensa del movimiento LGBTQ+ y de las ideologías radicales del islamismo, las cuales, de forma sutil, están invadiendo Europa para imponer su radicalismo islámico.

Pero nuestro enfoque en este artículo es analizar la problemática y el origen del pueblo palestino a través de la historia, así como su papel profético en el desenlace de las profecías de los últimos tiempos en torno a Israel. ¿Cuál es realmente la identidad del pueblo palestino y de dónde proceden? Este será nuestro primer análisis.

Antes de que existiera Palestina como territorio, esas tierras se consideraban la tierra de Canaán, y se menciona a Gaza en la Biblia desde Génesis hasta Sofonías (Génesis 10:19; Josué 11:22; 16:1-3; Jeremías 47:1; Amós 1:6-7; Sofonías 2:4). Era habitada por los amorreos, jebuseos, gergeseos, heveos, araceos, sineos, arvadeos, semareos, hamateos y jebuseos, con los cuales Israel tuvo que luchar para poseer el territorio. Todo comienza en Génesis 12, cuando Dios llama a Abraham a salir de Ur de los Caldeos para habitar en la tierra de Canaán, la tierra que fluía leche y miel. Todos los hechos relatados en Génesis a partir del capítulo 12 ocurren en este territorio. Después de la salida de Egipto, el pueblo hebreo conquistó esta tierra tras duras luchas contra las tribus nómadas de la región.

Durante el período de los reyes de Israel, los hebreos habitaron toda esta región, conviviendo y enfrentándose con diversas tribus nómadas. Tiempo después, por el deterioro del gobierno de los reyes judíos, fueron llevados cautivos en varias ocasiones, tanto por los caldeos como por los sirios. Posteriormente, estas tierras fueron pobladas por diversos pueblos nómadas.

Durante el imperio asirio y bajo el reinado de Nabucodonosor II, los hebreos fueron esclavizados hasta que, en el año 539 a.C., Ciro el Grande derrotó al Imperio Babilónico. Más tarde, Alejandro Magno conquistó esas tierras, que luego pasaron al poder de los romanos en el año 63 a.C. Fue entonces cuando el emperador Adriano, en el año 135 d.C., al sofocar una rebelión judía en ese territorio, le dio el nombre de “Siria Palestina”, derivado de los antiguos pueblos filisteos.

Con el tiempo, este pueblo se mezcló con otros de origen árabe, y al nacer el islam en el año 622 d.C., dicha religión fue implantada como ideología dentro del territorio que posteriormente dominaron los ingleses.

Según diversas fuentes históricas, la primera referencia al territorio de Judea como Palestina aparece en el siglo V a.C., cuando el historiador griego Heródoto la menciona como un distrito de Siria, llamado “Palestine”, ubicado entre Fenicia y Egipto, de acuerdo con sus escritos.

Continuará…

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