EL LLAMADO A PASTOREAR UNA CONGREGACIÓN CRISTIANA

Marcos Andrés Nehoda

pastorEs bueno estudiar y recibirse; aunque lo más importante es tener el llamado de Dios para el pastorado, el evangelismo, la enseñanza.  

Había una vez dos amigos, los dos pastoreaban sendas congregaciones evangélicas. Uno había estudiado y el otro no; uno era recibido con título universitario teológico y el otro se había formado en la brecha, fogueado y bronceado por el sol en el Servicio a Dios. Una vez se encontraron estos dos amigos. Uno -el que había estudiado- lo saludó y le dijo, medio en broma, medio en serio: -«¿Qué tal, PASTOR SIN DIPLOMA?». Y el amigo, a su vez, lo saludó también y le dijo, medio en broma, medio en serio: -«¿Qué tal, DIPLOMA SIN PASTOR?».

 Ser pastor en una congregación NO es una profesión, no es un título; ES UNA OBRA, ES UNA RESPONSABILIDAD, ES UN LLAMADO, ES UNA CARGA. 

Tenga o no el reconocimiento universitario, si ha sido llamado por Dios, no siendo un neófito en las cosas del Señor, si es una persona madura espiritualmente hablando y tiene capacidad para supervisar como atalaya y como un padre a la vez, entonces ES UN PASTOR puesto por Dios.

 Porque reúne las tres características bíblicas que se refieren a la misma persona: pastor, anciano y obispo. Un verdadero pastor congregacional debe tener la mente de un padre, el corazón de una madre… y el cuero de un rinoceronte para soportar problemas, incomprensiones, caprichos, envidias, ansias de poder, falsedad de ciertos pretendidos hermanos, pobreza, dolores de cabeza, desvelos y tantas otras cosas negativas.

No debe pretender pastorear porque tiene un título, ni porque es una forma de profesión o un medio de vida; debe hacerlo porque ha sido llamado por Dios, porque ha sido reconocido por la congregación y porque siente sobre sí mismo la carga ministerial. Dios obra por nosotros, con nosotros, en nosotros… a pesar de nosotros.

 La Palabra inspirada nos dice: “Palabra fiel: Si alguno anhela obispado, buena obra desea. Pero es necesario que el obispo sea irreprensible, marido de una sola mujer, sobrio, prudente, decoroso, hospedador, apto para enseñar; no dado al vino, no pendenciero, no codicioso de ganancias deshonestas, sino amable, apacible, no avaro; que gobierne bien su casa, que tenga a sus hijos en sujeción con toda honestidad (pues el que no sabe gobernar su propia casa, ¿cómo cuidará de la iglesia de Dios?); no un neófito, no sea que envaneciéndose caiga en la condenación del diablo. También es necesario que tenga buen testimonio de los de afuera, para que no caiga en descrédito y en lazo del diablo”. (1º Timoteo 3.1).

 

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Este es un espacio para compartir temas relacionados con la apostasia en la cual la Iglesia del Señor esta cayendo estrepitosamente y queremos que los interesados en unirse a este esfuerzo lo manifiesten y asi poder intercambiar por medio de esa pagina temas relación con las tendencias apostatas existentes en nuestro mundo cristiano.
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2 Responses to EL LLAMADO A PASTOREAR UNA CONGREGACIÓN CRISTIANA

  1. Avatar de Angel Agualsaca Angel Agualsaca dice:

    Dios a llamado para hacer buenas cosas para el pero lamentablemente hay muchos decin ser llamados pero a lo contrario solo ven para ellos desbaligando a sus obejas como de lugar con los trucos y artinañas y dicin que son apostoles pero no lo son

  2. Avatar de felix guerrero dominguez felix guerrero dominguez dice:

    La mujer también, ¿Es llamada a pastorear?

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