Mario E. Fumero
“Y no os conforméis á este siglo; mas reformaos por la renovación de vuestro entendimiento, para que experimentéis cuál sea la buena voluntad de Dios, agradable y perfecta”. Romanos 12:2
El ser humano es propenso a acomodarse y adaptarse a los cambios, solamente que muchas veces los cambios nos hace caer en el acomodamiento. Pablo se refiere a la adaptación y al acomodamiento usando el término conformados, cual indica adaptarse a los tiempos. Esta adaptación de nos lleva al conformismo, el cual disuelve muchos valores tradicionales y nos envuelve de una filosofía materialista que lentamente nos aparta de la perfecta voluntad de Dios.
¿Cuál es el peor enemigo de los cristianos y el mejor aliado del acomodamiento? El bienestar generado por las riquezas. Es por eso que la iglesia moderna ha perdido la santidad y el compromiso social porque ha caído presa de la codicia generada por la filosofía de la prosperidad que ha tomado matices de teología. Jesucristo presento la riqueza como una amenaza para alcanzar una vida plena espiritual (Mateo 13:22) y San Pablo afirma que el dinero es raíz de muchos males (1 Timoteo 6:10) el cual codiciando algunos cayeron en lazos del Diablo.
No dejemos que los afanes de este siglo y la búsqueda del bienestar nos hagan sucumbir en una pobre y raquítica vida espiritual.

