Mario E. Fumero
A partir del año1996, y a nivel mundial, se comenzaron a incrementar los suicidios en jóvenes y adolescentes. En estudios recientes realizados por expertos en la materia, se han determinado que uno de los factores que ha influenciado mucho en este fenómeno juvenil es la adicción a los videojuegos y a los celulares. Actualmente los especialistas en psiquiatría y psicología están considerando la adicción de los jóvenes a las redes sociales y a los videojuegos como una enfermedad adictiva que puede traer graves consecuencias, ya que afecta la dopamina, originando reacciones y comportamientos anormales.
¿Pero qué es la dopamina? Es uno de los muchos neurotransmisores que usan las neuronas para comunicarse entre ellas, y es una sustancia que no solo la produce diversas sensaciones en el ser humano, sino que altera las emociones, aumentando los niveles de serotonina y oxitocina, las cuales a su vez disparan el aumentando los niveles de adrenalina, afectando ciertas reacciones del organismo en el ser humano.
Esto ha provocado que se registren caso de adolescentes que, al prohibírseles los videojuegos o los celulares, adopten actitudes violentas y anormales, incluso acudiendo algunos al suicidado. Recientemente una jovencita de 15 años, cuándo su madre le quitó el celular por malas notas en la escuela, la joven, en un arranque de ira, se tiró por una ventana del tercer piso, suicidándose.
El consumo excesivo de internet, celulares, y videojuego aumentan los altos índices de dopamina, y puede crear algoritmos inducidos por las redes sociales a dimensiones tan adictiva, qué los jóvenes pueden sufrir trastornos graves de conducta, además de una severa adicción tecnológica.
¿Cuántas horas debe permanecer un joven conectado a las redes sociales o internet? Según afirma los expertos, que cuando el consumo de internet o celulares sobrepasa las tres horas diarias, el individuo pueden quedar atrapado en esta adicción, principalmente en la adolescencia, y causarle daños en la conducta social, familiar y de estudio, principalmente en los menores de 12 años, creando situaciones muy anómalas respecto a su conducta y sociabilización. Los casos de adolescentes afectados por las redes sociales se han incrementado alarmantemente y han trascendido casos a la opinión pública que son alarmantes, como por ejemplo, el caso de una jovencita de 13 años que en un vuelo aéreo, cuando la madre le quitó el celular por las prohibiciones establecidas en las normativas de aviación, la menor empezó a gritar y llorar histéricamente, armando un espectáculo público en pleno vuelo que detuvo el despegue, y tuvieron que intervenir las autoridades.
La tecno-adicción es uno de los grandes males que actualmente padecemos, y lo he comprobado como pastor, ya que, al hacer retiros o campamentos juveniles, si a los jóvenes se le prohíbe llevar los celulares, muchos de estos deciden de ellos no ir, y muchas veces, en los programas de rehabilitación por consumo de droga, mucho desisten de rehabilitarse de las drogas, porque no quieren desprenderse de su celular, ya que en los mismos se les prohíbe.
La tecnología aplicada a los aparatos móviles es un arma poderosa para manipular la mente y la conducta de las personas, y como dijo una vez el gran científico Albert Einstein “Temo el día en que la tecnología sobrepase nuestra humanidad. Entonces el mundo solo tendrá una generación de idiotas” y ya estamos llegando al cumplimiento de esta profecía científica.
¿Quiere suicidar a tu hijo intelectualmente? ¿Quiere llevarlo a una adicción que le puede conducir a trastornos mentales? Simplemente no le controles el uso de internet ni de redes sociales, y regálale un celular inteligente cuando es pequeño, para que cuando sea grande se vuelva idiota.